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La directora general adjunta de A.M.A. y responsable del ramo de Responsabilidad Civil Profesional, Raquel Murillo, ha dirigido una mesa redonda dentro Congreso Nacional del Derecho Sanitario, que celebra su XXIX edición.

El encuentro se centró en la los conflictos ético-jurídicos que han surgido después de la entrada en vigor de leyes que regulan el aborto, la eutanasia o el cambio de sexo y cuya aplicación afecta a los profesionales sanitarios, además de tener una repercusión directa en la sociedad.

La moderadora de la mesa, Raquel Murillo, ha remarcado en su intervención que el ejercicio de determinados derechos como estos mencionados, "requiere de la activa colaboración de los profesionales sanitarios". Considera que esta colaboración se hace necesaria tanto para la realización de los tratamientos como en el proceso previo de información. Sobre todo ello, ha indicado que su aplicación "puede dar lugar a conflictos éticos de gran calado en un contexto en el que confluyen y, en ocasiones, también se contraponen el derecho a morir o abortar y el derecho del sanitario a objetar". En su opinión, y por todo ello, la aplicación de estas normas va a tener repercusiones de manera inevitable a medio y largo plazo. Éstas serán tanto para los pacientes, como para los profesionales y para el sistema sanitario en general". Por último, ha resaltado que estos conflictos "minan al profesional sanitario que se siente cuestionado en su actividad".

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