Grupo Aseguranza

Eiopa acaba de lanzar el test de estrés de 2024, por el que someterá a las aseguradoras europeas un escenario hipotético de evolución adversa grave pero plausible de las condiciones financieras y económicas. En concreto, ante un panorama de intensificación las tensiones geopolíticas, para lo que evaluará cómo las aseguradoras afrontarían las amplias consecuencias económicas y para los mercados financieros de tal evento.

"Aunque la prueba de resistencia 2024 de Eiopa no es un ejercicio de aprobado o suspenso, tiene una orientación principalmente microprudencial. El objetivo es principalmente evaluar la resiliencia de los participantes ante el escenario adverso cuyos choques van más allá de la resiliencia regular exigida en Solvencia II y proporcionar a los supervisores información sobre si estas aseguradoras son capaces de soportar choques severos", puntualiza. Afirma que este enfoque microprudencial permitirá a los supervisores europeos y nacionales formular recomendaciones al sector en su conjunto y, en su caso, debatir posibles medidas de seguimiento con aseguradoras individuales, a fin de mejorar su resistencia.

Sobre el escenario de 2024, elaborado por Eiopa con la Junta Europea de Riesgo Sistémico, "presupone un aumento renovado o la continuación de las tensiones geopolíticas, junto con una amplia gama de efectos en cadena. Como resultado de las elevadas tensiones, se prevé un recrudecimiento de las perturbaciones generalizadas en la cadena de suministro, lo que provocaría una ralentización del crecimiento y reavivaría las presiones inflacionistas". Ese efecto dominó incluye una reevaluación de las expectativas de tipos de interés marcada por un repunte de los tipos de mercado a corto plazo y aumentos moderados a más largo plazo. Se trata de un endurecimiento de las condiciones de financiación lo que unido a un crecimiento moderado "está a punto de mermar la rentabilidad de las empresas, ampliar los diferenciales de crédito y afectar negativamente a todas las clases de activos", añade.

El calendario previsto para el test de estrés incluye que las empresas participantes tendrán hasta mediados de agosto de 2024 para calcular sus resultados basados en el escenario prescrito y presentarlos al supervisor nacional correspondiente. Eiopa prevé que el análisis de los resultados concluya a finales de año.

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