PSOE, Ciudadanos y Podemos reafirman la actualidad del Pacto de Toledo para la próxima legislatura
El debate que organizó anoche el diario El País, en el que participaron los candidatos a las próximas elecciones generales por parte del PSOE, Pedro Sánchez, de Ciudadanos, Albert Rivera y de Podemos, Pablo Iglesias, introdujo el tema de las Pensiones y su futuro.
Más trabajo
El candidato socialista opinó en primer lugar que es partidario de liberar el sistema de copagos en general y recuperar la sostenibilidad. Indicó que apostará por el Pacto de Toledo para garantizar el sistema y criticó que el Partido Popular ha precarizado las cotizaciones durante los últimos años y él se ha comprometido a cambiar la reforma laboral para corregirlo.
Por su parte, el líder de Ciudadanos ya había defendido, con anterioridad en el debate, la vuelta al Pacto y señaló que será útil para la “estabilidad y seguridad” y destacó que no se puede mercadear con las Pensiones. Reconoció que para la estabilidad hay que trabajar y propuso bonificaciones en la contratación de mayores de 45 años y que el sistema ayude a que los mayores contribuyan con su experiencia a empresas de gente joven.
El candidato de Podemos se mostró tímidamente partidario de los grandes pactos, aunque matizó que hay que reconocer que el verdadero problema son los cotizantes. Su propuesta es que una parte de las Pensiones se financie con impuestos y regresar la jubilación a los 65 años. Añadió que quitarían los beneficios fiscales a los planes privados.
Financiación complementaria
En el turno de réplica Albert Rivera pidió que tanto Podemos como PSOE explicaran cómo van a introducir el nuevo impuesto. Pedro Sánchez indicó que su partido es partidario de la financiación complementaria porque “no vamos a subir cotizaciones a la Seguridad Social”.
Por parte del partido del Gobierno no acudió ningún representante. En la misma hora el presidente del ejecutivo, Mariano Rajoy, era entrevistado en Telecinco. Allí señaló que quien contrate a una persona de manera indefinida no pagará la cuota de la Seguridad Social durante cuatro años por los primeros 500 euros. Además, el trabajo tampoco contribuirá.