Grupo Aseguranza

AIG ha informado de que está llevando a cabo desde comienzos de año unas sesiones formativas denominadas ‘K&R Flash Training Series’, con el objetivo de formar a sus mediadores en materia de Duty of Care corporativo, gestión del riesgo de seguridad personal para viajeros, expatriados y sus familias, y soluciones de su producto ‘AIG Crisis Solution’. Estas sesiones tienen el formato de píldoras de 60 minutos en grupos reducidos, tanto presenciales en Madrid y Barcelona, como a través de webinars on-line. Son impartidas por Eduardo Guinea, product manager Special Risk & UW Team Leader de AIG España, y por Juan Muñoz, CPP CSMP CSyP MBA, senior consultant de NYA International.

Para Eduardo Guinea: “AIG Crisis Solution ha evolucionado desde una perspectiva reactiva hacia un enfoque proactivo para la mitigación del riesgo. Nuestra póliza trabaja sobre 3 pilares fundamentales, y 2 de ellos son puros servicios a favor del tomador de la póliza: prevención, respuesta y seguro. Trabajando desde la prevención, proporcionando una respuesta única en caso de incidente y adaptando las garantías de la póliza a las necesidades de los clientes, conseguimos garantizar y mitigar riesgos de responsabilidad corporativa y de seguridad personal. A través de nuestra póliza de K&R no solo se facilita una transferencia financiera del riesgo, sino que además se proporciona a los empleados la confianza necesaria para representar a su compañía en cualquier lugar del mundo. Sin duda, esta iniciativa está teniendo una acogida incomparable y el feedback de todos los asistentes está siendo tremendamente positivo".

Juan Muñoz manifiesta que "la globalización ha abierto un amplio abanico de nuevas oportunidades para las empresas españolas, pero estas han traído consigo un muy considerable incremento de los riesgos y amenazas, especialmente en los llamados países con entornos complejos. El mundo está atravesando un periodo de elevada turbulencia, inestabilidad y volatilidad, con escenarios cambiantes en solo unas horas. Estoy convencido que las empresas españolas han asumido la 1ª parte, la del nuevo negocio, pero no estoy seguro que haya sucedido lo mismo con la 2ª: el incremento de los riesgos y la vulnerabilidad. Algunos de estos riesgos, como determinadas enfermedades o la elevada delincuencia callejera, habían sido olvidados y otros, como el crimen organizado, la corrupción, la ciber delincuencia, el secuestro y la extorsión, vuelven y adquieren dimensiones y frecuencias no conocidas hasta ahora. En cuanto al terrorismo, ningún país está a salvo, como hemos visto recientemente, pero en algunos países las circunstancias y probabilidades cambian sustancialmente. Hay que tener en cuenta además, que en entornos complejos, muchas incidencias, sin importancia en el entorno habitual, derivan en incidentes de seguridad. Todo esto afecta directamente a cómo las empresas gestionan su riesgo en el exterior, lo que tiene relación directa con el buen gobierno corporativo a través del Deber de Cuidado, cuyo coste adicional debe ser tenido en cuenta”.