01 de julio
11:21
2013
El nº de coches de particulares asegurados por el Consorcio cae un 46,3%
El consejo del Consorcio de Compensación de Seguros aprobó el 25 de junio las cuentas anuales del ejercicio 2012. En el ámbito del seguro de riesgos extraordinarios, la siniestralidad del ejercicio estuvo determinada por las inundaciones producidas a lo largo del año, de las que las más relevantes fueron las del Sureste Peninsular, en septiembre, con un coste estimado de más de 220 millones de euros. Se cierra un periodo de 4 años (2009-2012) marcado por la severidad en los daños causados (más de 584.000 expedientes de siniestro tramitados y un coste total de 2.226 millones de euros) y la diversidad de hechos que los han generado: Tempestad ciclónica atípica, inundación extraordinaria y terremoto.
Respecto al seguro de Autos, el nº de vehículos asegurados directamente en el Consorcio en la cobertura de RC se ha reducido significativamente en los últimos años, tanto por lo que se refiere a los vehículos de particulares que no encuentran cobertura en entidades aseguradoras privadas, como respecto a los vehículos de organismos oficiales que optan por el aseguramiento en el Consorcio. En el periodo 2011-2012 el nº de vehículos particulares asegurados por el Consorcio descendió un 46,3%, mientras que los oficiales lo hacían en un 7,1%. La ratio de siniestralidad se situó en el 56,5% en el caso de los vehículos de particulares, mientras que la de vehículos de organismos oficiales alcanzó el 129,1%. En lo que se refiere a la función del Consorcio como fondo de garantía en la cobertura de los daños causados por vehículos no asegurados, robados o desconocidos, la ratio de siniestralidad se situó en el 50,8%.
El número total de expedientes de la actividad general ascendió a 98.510, de los cuales 54.500 correspondieron a riesgos extraordinarios, 43.968 al seguro de automóviles y 42 a otras coberturas.
Seguros agrarios y reaseguro
La actividad del Consorcio durante 2012 en el ámbito de los seguros agrarios estuvo caracterizada por la alta siniestralidad, la peor de toda la serie histórica del sistema de seguros agrarios, que ha supuesto para el Consorcio un impacto negativo de 213 millones en su función de reasegurador del sistema. La ratio de siniestralidad en su conjunto fue del 228,4% de las primas. En cuanto a la actividad del reaseguro adquirió un carácter residual, al ceñirse a la mera terminación de los contratos ya extinguidos de las entidades aseguradoras que durante el 2009 y 2010 se adhirieron al convenio de reaseguro de crédito suscrito entre el Consorcio y Unespa. La siniestralidad del reaseguro cuota parte fue negativa, al corresponder únicamente a regularizaciones de primas y siniestros de ejercicios anteriores. Respecto a la actividad liquidadora, en 2012 se asumieron las liquidaciones de 3 entidades aseguradoras (Mutualidad de Previsión Social a Cuota Fija PCAE-Vigo, Mutua General Deportiva‐MGD y Seguros Mutuos Contra Incendios de Casas del Valle del Mena) y se celebraron juntas de acreedores en 3 entidades; habiéndose efectuado compras de créditos por valor de más de 18,4 millones de euros.
Gestión de las inversiones
La gestión de las inversiones se materializó mayoritariamente en títulos de renta fija, un 92%, frente a la renta variable y fondos de inversión que totalizan un 8%. La contribución de los rendimientos de las inversiones al resultado total sobre las primas y recargos se situó en cifras equivalentes al 20% en la actividad general, el 24,3% en la agraria y el 116,4% en la liquidadora.
El excedente del ejercicio se destinó a la dotación de la reserva de estabilización en la actividad general por 415,4 millones y al Fondo para la Liquidación de las Entidades Aseguradoras por 91,6 millones. Por su parte, el resultado negativo de la actividad agraria se compensó mediante la aplicación de la reserva de estabilización acumulada en esta actividad. Tras estas dotaciones y aplicaciones, las reservas de estabilización disponibles para la cobertura de los riesgos asegurados alcanzaron al cierre de 2012 un importe de 5.755,4 millones en la actividad general y 744,1 millones en la Agraria. El Fondo para la Liquidación de las Entidades Aseguradoras se sitúa en 1.715 millones.
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